Hoy, gracias a Snapchat, Facebook, Youtube, Twitter, Google+, Tumblr, Blogspot, Wordpress y miles de otras redes sociales más, los seres humanos nos hemos convertido en robots estupidizados de sobre exposición de hechos, noticias, vidas e historias... Al parecer la cámara digital, Go pro, celular inteligente con cámara de 100 mpx y vídeos en Ultra HD, en combinación de redes sociales se ha vuelto una mezcla peligrosa que a veces en muchos casos elevan el ego hasta del más alicaído de autoestima y autoconcepto.
Publicar nuestras vidas, vidas de otros, cosas que observamos en la calle, cosas que nos gustan, cosas que no nos gustan, las ocurrencias de nuestras mascotas y otros, en una pantalla de 5, 10 o 15 pulgadas se ha vuelto realmente excitante, además de los likes, me gusta, corazones y aprobaciones que parecen una droga más fuerte que la cocaína en algunos casos.
Personalmente me superaron dos situaciones que ocurrieron hace muy poco. La primera sucedió en una playa argentina y trató de un delfín que murió en manos de bañistas que querían sacarse selfies con él (leer: Un delfín muere a manos de unos bañistas que querían un "selfie").
Un grupo de turistas alzan a una cría de delfín para fotografiarse con ella en Buenos Aires, vía Elmundo.es |
¿Cómo es posible que un grupo tan grande de personas, tome a una cría de delfín para atiborrar su Instagram, Facebook o lo que sea con selfies "novedosas!?... Al parecer estamos perdiendo el rumbo, ya que lo más sensato si vez a una cría es devolverlo a su lugar de origen o padre, no sobre exponerlo a la cámara y quitarle su elemento vital.
Luego, como si eso no fuera poco, en Florida unas personas sacaron a un tiburón del agua, ¿Para qué?... Para una selfie (VIDEO: Sacan a tiburón del mar en Florida para tomarse una ‘selfie’)
¿A tal nivel a llegado esa adicción a sobre exponer?, ¿Lastimar a un animal indefenso, sólo para tener una "buena foto" que será premiada por unos cuantos likes y salir como un reverendo estúpido en el periódico o noticiero?... ¿Vale la pena? Lo dudo, de hecho no lo creo.
Siempre es bueno detenerse y reflexionar al respecto de cosas que no sólo nos dañan a nosotros si no que a nuestros compañeros de planeta, los que en la mayoría de los casos son más débiles que nosotros y no tienen la culpa de encontrarse con estúpidos armados de un celular.
Para finalizar no cabe sólo meditar sobre la sobre exposición en redes sociales de pobres animales inocentes, si no, que de nuestras propias vidas. Subir el pantalón que te compraste, el reloj que te regaló pedrito, tu hijo de 3 meses, como se quema la casa del vecino, como se derrumba el edificio victima del atentado, etc, ¿Es necesario compartirlo con todo el mundo?, ¿Le interesa al resto?, ¿Ganamos algo al hacerlo?. La verdad yo igual me he vuelto una estúpida con cámara en mano y celular, registrando cada segundo de vida, pero la mayoría del tiempo siento culpa y pienso que al resto que no comparte mi vida conmigo, no necesita saber que me pasa o como estoy. Por favor reflexionemos, meditemos y valoremos nuestra privacidad, la cual es valiosísima, mayor privacidad, menos problemas, menos intrusos y menor ruido. Siempre es mejor mantener los recuerdos en el corazón o en el álbum familiar, sólo para que algunos afortunados los conozcan y además de no lastimar a flora o fauna inocente por un maldito like.
Recomiendo leer: Mueren más personas por selfies que por ataques de tiburón